Con la crisis generada por la pandemia del COVID-19 y la cuarentena dada por el Gobierno Central, las empresas deben abordar acciones para gestionar su sostenibilidad y dar cumplimiento a las disposiciones legales. Aquí dejamos algunas medidas transversales para cualquier sector empresarial que desarrolle sus planes de vigilancia, prevención y control:
PRIMERO: Revisar su condición de formalidad.
Aproximadamente más del 40% de empresas PYME no cuentan con licencia de funcionamiento y no han definido un régimen laboral para sus trabajadores. Ser formal en un país con alto índice de informalidad puede ser una gran ventaja competitiva en estos tiempos.
SEGUNDO: Contar con un plan de vigilancia, prevención y control, que esté implementado y registrado en plataforma MINSA.
A la actualidad solo el 15% de todas las actividades económicas que pueden ya activarse, cuentan con registro SICOVID. Esto denota aun la falta de regularización y prioridad que deben tener las empresas que deben preocuparse por garantizar a sus clientes que cuentan con operaciones controladas sanitariamente. Aquí las principales medidas a adoptar:
- Distanciamiento mínimo de 1 metro.
- Control de temperatura diario con resultados mínimo de 37.5ºC
- Limpieza y desinfección de ambientes de trabajo
- Capacitación constante a las personas
- Tener un plan de salud mental que abarque acciones para la reincorporación de trabajadores con sintomatología COVID-19.
- Dotar de equipos de protección personal a todos los colaboradores.
- Contar con un presupuesto analizado para el sostenimiento de todas las medidas sanitarias.
En Calidar Consultores contamos contamos con el servicio de Plan Vigilancia, Prevención y Control (Protocolos Sanitarios) ayudar a las organizaciones a retornar a las actividades de manera segura para todo su entorno y minimizar las probabilidades de contagio. Contáctate con nosotros para más información.
TERCERO: Mantener a flote el negocio: sosteniéndolo o reinventándolo.
Se deben aprovechar las oportunidades de préstamos garantizados y otorgados por el Gobierno a baja tasa de interés, para lograr subsistencia o hacer un viraje al negocio principal. En la actualidad se vienen dando varios nuevos negocios a raíz de la pandemia. No debemos verlo como una fuente de gasto, sino como una inversión, puesto que el objetivo es que la utilidad neta se incremente.
CUARTO: Desarrollar la gestión digital y agilidad organizacional.
La pandemia global ha acelerado aspectos digitales en las empresas que deben adoptar y desarrollar en pro de su sostenibilidad. Herramientas digitales para el trabajo remoto, comercio electrónico por citar dos ejemplos que nos ayudarán a ser más eficientes.
QUINTO: Evaluar los cambios tributarios.
El Estado emitió cinco normas: prórroga de recuperación anticipada de IGV, beneficios de donaciones por 5 ejercicios, modificación del coeficiente de pago del impuesto a la renta, depreciación acelerada de activos fijos y fraccionamiento de deuda tributaria.
SEXTO: Vislumbrar el nuevo normal en función a la planificación estratégica basada en riesgos.
No sabemos cómo será el futuro, pero podemos tomar acciones concretas para cubrirnos ante nuevas incertidumbres estableciendo un plan de continuidad de negocios que nos conduzcan a la sostenibilidad y tener un camino con propósito.
